Estadio Balear

Los éxitos deportivos del club hicieron que el campo se quedase pequeño.

Estas circunstancias hicieron que se impusiese la idea de construir un campo nuevo y tenerlo en propiedad.

[3]​ Para su construcción se constituyó una comunidad de propietarios (Procampo), que aún continúa en funcionamiento y administra su uso.

La alineación del partido inaugural fue la siguiente: Bermell, Crespí (Daga), Beltran, Eraña, Cantallops, Villar, Fita, Ricardo, Morro, Peña y Macario.

Pero los jugadores del Birmingham City FC, viéndose derrotados contra un equipo de inferior categoría, empezaron a mostrarse con violencia sobre el campo.

Así se produjo un hecho que ha sido tristemente recordado durante décadas: el jugador británico Murphy hizo una terrorífica entrada sobre el capitán del Atlético Baleares, Crespí, provocándole una grave lesión que le impidió volver nunca más a los terrenos de juego.

Todos estos factores ocasionaron que el estadio presentase un estado progresivamente envejecido y falto de mantenimiento.

La revisión y posterior informe técnico del propio ayuntamiento aconsejaron su clausura por amenaza de derrumbe.

Tal fue el abandono que la instalación sufrió actos vandálicos y de saqueo tras los cuales desaparecieron trofeos y objetos de gran valor patrimonial que no habían sido puestos a salvo.