La piedra del altar, muy meteorizada, se trasladó a un lugar diferente.Iglesia y ermita estaban dedicadas a San Martín, cuya imagen fue robada.Hasta los años 1970, cada año, por la fiesta del santo (11 de noviembre), se hacía una romería a la ermita, situada a unos 2 km del pueblo.El martes anterior a la fiesta de la Ascensión (que cae en jueves), por la mañana, se iba en procesión a la ermita, con el párroco cantando las letanías.El cura ponía en aquel alto (como se hacía en otros por esos días) unas cruces para conjurar plagas y tormentas.