Enseñanza programada

[1]​ Según Skinner, el objetivo de la enseñanza programada es «dirigir el aprendizaje humano bajo condiciones controladas».[2]​ La enseñanza programada tiene tres elementos: (1) entrega la información en pequeñas píldoras, (2) es al ritmo propio del estudiante y (3) proporciona retroalimentación inmediata, tanto positiva como negativa, al estudiante.Para B. F. Skinner esta respuesta es emitida por el organismo, y no producida por estímulos, aun cuando generalmente adquiere una relación con la estimulación previa, sin que ésta llegue a ser generadora como en el caso del reflejo.La situación ideal, según Rousseau, se da cuando el maestro atiende a un solo alumno.El maestro individual puede constatar el progreso del alumno continuamente, puede hacer que el alumno tenga una participación activa, a través de preguntas, discusiones, etc., que puede ser orientada y dirigida constantemente.Podemos suponer que si ese maestro perfecciona su programa de enseñanza, podrá, luego de realizar su labor individual con diferentes alumnos, y de hacerles las correcciones y modificaciones que la experiencia le haya sugerido, reproducir la sucesión didáctica, en forma tal que el alumno la lea paso a paso, y respondiendo las preguntas correspondientes, llegue por sí mismo al aprendizaje deseado.