El enoftalmos, es el desplazamiento posterior del globo ocular de tamaño normal dentro de la órbita, por lo que el ojo adopta un aspecto hundido.
La alteración contraria al enoftalmos se denomina exoftalmos y consiste en que el ojo sobresale más de lo normal hacía afuera.
[1][2] Las causas más frecuentes de enoftalmos bilateral son la pérdida de grasa de la órbita en personas de edad avanzada y la deshidratación.
[1] El enoftalmos debe distinguirse del llamado falso enoftalmos, que está causado por disminución del tamaño del ojo (microftalmos), caída del párpado (ptosis) o exoftalmos del ojo contrario.
Cuando se producen lesiones del simpático cervical, como en el síndrome de Horner, tiene lugar una caída del párpado superior en forma unilateral e incompleta, que sumada a la elevación que se produce en el párpado inferior condiciona la falsa impresión de enoftalmos.