Entre 1346 y 1371, el monarca serbio portó el título de zar de los serbios y griegos (serbio: цар Срба и Грка), o basileus [emperador] y autocrátor de Serbia y Romania [tierra de los romanos] (en griego: βασιλεὺς καὶ αὐτοκράτωρ Σερβίας καὶ Ῥωμανίας).
En las cartas serbias, se utilizan términos étnicos – «emperador de los serbios y romanos» (цар Срба и Грка).
Cuando Dušan murió en 1355, su hijo Esteban Uroš V le sucedió.
La caída del Imperio serbio vio la fragmentación del Estado en provincias gobernadas por magnates, que poseían diversos títulos, excepto el imperial.
En 1527, un comandante renegado serbo-húngaro, Jovan Nenad, se hacía llamar emperador.