Fueron las décimas elecciones al Parlamento de Cantabria y las segundas con Felipe VI como rey.
Vox entró por primera vez en el parlamento regional con dos escaños y Podemos perdió todos sus diputados.
[6] En cuanto al número de diputados a elegir, el Estatuto cántabro prevé que el Parlamento se componga de entre 35 y 45 diputados.
[6] Los candidatos se presentan en listas cerradas de los partidos políticos, y el voto es directo y secreto, pudiendo votar todos los mayores de 18 años.
La participación comenzó siendo muy similar a las pasadas elecciones, aunque acabó siendo casi cinco puntos superior.