La Asamblea de Madrid fue incapaz de investir a un nuevo presidente regional tras la dimisión de Alberto Ruiz-Gallardón y las elecciones tuvieron que repetirse cinco meses después.
El Partido Popular obtuvo una mayoría simple de 55 escaños, frente a los 47 del Partido Socialista Obrero Español y los 9 de Izquierda Unida.
Los diputados tránsfugas Eduardo Tamayo y María Teresa Sáez rechazaron integrarse en el grupo parlamentario del PSOE, pasando a formar parte del grupo mixto.
Las dos votaciones celebradas impidieron la investidura como presidente de la Comunidad de Madrid del candidato del PSOE, Rafael Simancas.
[4] La Comunidad de Madrid permaneció gobernada durante casi siete meses en funciones por Alberto Ruiz Gallardón, cargo con el que simultaneó la alcaldía de Madrid.