[1] El presidente Michel Martelly estaba impedido constitucionalmente de presentarse a la reelección.
[2] Aun cuando el 21 de enero el presidente Michel Martelly anunció que se realizaría la segunda vuelta a como diera lugar,[3] al día siguiente el Consejo Electoral Provisional (CEP) anunció que la elección fue pospuesta hasta nuevo aviso debido a los crecientes disturbios y enfrentamientos entre adherentes de los candidatos.
[7] Las autoridades competentes recibieron las reclamaciones, y decidieron qué candidatos serían excluidos de la contienda presidencial.
Emitieron una declaración conjunta denunciando los resultados como "anti-democráticos" y llamaron a que se respetara el voto popular.
Los adherentes de Célestin protestaron en las calles, junto con los adherentes de Jean-Charles Moïse y adherentes del partido Fanmi Lavalas del expresidente Jean-Bertrand Aristide -de la cual su candidata Maryse Narcisse había terminado en cuarto lugar, y que también había denunciado los resultados durante una conferencia de prensa-.