Es el primer libro de la trilogía Crónicas del mago negro.
La sociedad de Imardin está dominada por los nobles, única clase social de la que nacen los magos que componen su mayor fuerza bélica y policial.
Una vez al año, los magos expulsan a los pobres de los barrios ricos de la ciudad, en una ceremonia llamada "la Purga" durante la que emplean la magia para evitar toda resistencia.
La escritora afirma que se inspiró en los sucesos previos a las Olimpiadas de Barcelona en 1992 para la Purga.
Solo puede significar que Sonea posee poderes mágicos, y por tanto supone un grave peligro a menos que sea entrenada o se supriman sus poderes.