Es peligroso, pero es su única oportunidad, pues no tienen a Appa para llevarlos sobre el canal.
El grupo esta por irse, cuando se cruzan con una familia de refugiados: Tahn, su esposa embarazada; Ying, y su hermana.
En lugar, planean viajar vía un sistema de ferris (embarcaderos) subterráneo, que conduce los refugiados a Ba Sing Se.
Aang solicita cuatro boletos, pero se les niegan pues él no tiene ningún pasaporte.
Sokka parece reconocer a la muchacha, pero no puede identificarla del todo… hasta que ella le da un beso en la mejilla.
Sin otra opción para la familia, Aang regala sus boletos, y les ofrece dirigirlos a través del paso de la serpiente.
Sokka, sabiendo que será probablemente peligroso, es renuente a dejarla venir con ellos, pero pronto accede.
Ella replica; ¿Qué pasa?, Sokka se calma y le dice que creyó ver una araña.
Sokka y Suki casi comparten un beso bajo del ojo atento de la luna.
Aang recuerda cuan destructivo es él cuando entra al estado Avatar, y está intentando controlarse.
Suki le dice a Sokka sobre alguien que ella quiso, y perdió también, aunque él solo se fue lejos.
En el ferry, Jet y los combatientes de la libertad están distribuyendo su alimento robado entre los otros pasajeros.
Smellerbee agradece a Longshot por recordarle que no debe preocuparse por las palabras de otros siempre y cuando tenga confianza en sí misma.
Jet parece estar arrepentido de sus acciones anteriores, y desea comenzar una nueva vida.
Ella comienza a cruzar, cuando la serpiente destruye el hielo, enviándola al agua.
Sokka dice que viene detrás de ella, pero Suki se zambulle primero y la salva.
Mientras tanto, Aang vuela encima de la pared del Ba Sing Se, donde hace un descubrimiento terrible: Un inmenso taladro, escoltado por los tanques de la Nación del Fuego, se está aproximando a la pared.