En la creación del periódico fue acompañado por los abogados Darío Verdugo Urrejola y Manuel Gregorio Balbontín, junto con un grupo de eminentes conservadores puertomontinos, siendo su primer director Antonio Staforelli.
[2] Ya en 1910, al cumplirse 25 años de su fundación, su venta se había extendido hasta Chiloé y se autodefinía como «asiduo defensor de nuestra religión católica y el baluarte del Partido Conservador».
Sus principales competidores durante sus primeras décadas de vida fueron La Alianza Liberal (1891-1920), y El Correo del Sur (1910-1937).
[5] En 1934 la empresa periodística abrió un salón social para que se realizaran actividades culturales y deportivas.
La portada de El Llanquihue fue la primera en todo el país en informar del nuevo acontecimiento bélico.
[2] Pese a la pérdida, en 1962 se habían adquirido dos modernos equipos de radio-teletipo WESTREX, con lo que se logró ampliar el servicio informativo al recibir noticias directo desde Nueva York.
Este hecho significó un gran golpe para el centenario periódico, puesto que El Diario Austral poseía un gran avance tecnológico, respaldo financiero y una amplia experiencia periodística y comercial.