El último gran mago

Empobrecidos y sin educación, las impostoras escocesas Mary McGarvie (Catherine Zeta Jones) y su hija Benji (Saoirse Ronan) fijan sus miradas en la recompensa de Houdini e intentan engañarlo.

Con el paso del tiempo, entre Mary y Houdini nace una atracción inevitable...

Catherine Zeta-Jones entró en el proyecto después del abandono de Rachel Weisz, debido a su embarazo.

La actriz aceptó participar en la película enamorándose del personaje, por cuya interpretación recibió un salario mucho más bajo de lo habitual.

Guy Pearce tardó seis semanas en aprender los trucos de Harry Houdini.