Viuda de Antoni Comas i Pujol con quien tuvo tres hijas.
Durando estos años estableció las bases del actual sistema bibliotecario catalán, adaptando la normativa catalográfica a través del Instituto Catalán de Bibliografía y abriendo nuevas bibliotecas para dar más servicio a la población.
Bajo su lema "abierta, fiable y útil" modernizó la BC dotándola de nuevos equipamientos, mejorando los procesos internos y encarando la catalogación del fondo pendiente de procesar.
Bajo su dirección se adquirieron numerosos fondos patrimoniales musicales, literarios o gráficos.
Es viuda del crítico literario y catedrático Antoni Comas i Pujol.