El dolio fue un instrumento musical aerófono, usado en el norte de la península ibérica (especialmente en Galicia) durante la Edad Media y que posteriormente cayó en desuso.
[1] Su nombre proviene de la similitud que sostiene con los dolia, toneles usados antiguamente en el transporte marítimo.
Así mismo, tiene también un pico dispuesto perpendicularmente al eje longitudinal situado en el centro del cuerpo.
No cuenta con ningún sistema de modificación de la altura del sonido que produce, con lo cual sus posibilidades se reducen a una sola nota pedal que acompañaría las melodías y ritmos realizados por otros instrumentos (sobre todo de cuerda -pulsada o frotada-) u otros aerófonos, junto a los cuales acostumbra a aparecer en las esculturas.
Es por esta razón que todas las esculturas encontradas se concentran en un período tan corto (1150-1200 aprox.