Entre la repetición de las estrofas, y como introducción, la música popular folclórica tiende a realizar pasajes con solos de guitarra, generalmente rasgueados.
El estudio acucioso y la reiterada observación de los intérpretes populares, permitieron a Pedro Humberto Allende captar con justeza cómo la rítmica popular no se ajusta en la música criolla.
En los tiempos vivos conserva la medida en 6/8, manteniendo el toque folclórico tradicional.
[2] El sello SVR publicó el disco Bicentenario de la Guitarra Chilena, vol.
1 (2009), donde el destacado guitarrista chileno Luis Orlandini interpretó sus propias transcripciones de las tonadas N.º 4, 5 y 6 (1985).