Desde este depósito el agua se distribuye a la red de abastecimiento para su consumo.
En esta etapa, el agua se desinfecta con dióxido de cloro e hipoclorito sódico.
El paso siguiente es la entrada del agua pretratada y filtrada en el sistema por ósmosis inversa (oi).
Con una presión de 70 atmósferas se impulsa hacia las membranas filtrantes, que solo dejarán pasar el agua y no la sal ni el resto de elementos que todavía contenga.
El agua que sale de este proceso necesita ser remineralizada para el consumo.
Esto se hace con camas de calcita y con hidróxido sódico.
El agua destinada al mar se mezcla con las salmueras resultantes del proceso de desalinización.
El regreso de esta agua no genera ningún impacto negativo en el medio marino, porque la salinidad es similar a la del mar.
Además, la calefacción, la refrigeración y el agua caliente sanitaria que necesita la planta se produce mediante energía solar térmica.
[7] Posteriormente, se encontraron otros problemas técnicos que harían rebajar su rendimiento total hasta el 70 %, debido a deficiencias en válvulas y depósitos.