Se utilizan para que los usuarios o potenciales clientes puedan probar el software antes de comenzar a utilizarlo en un ambiente real.
Son instalaciones de programas con el único fin que los usuarios puedan evaluarlas sin necesidad de tener que realizar una instalación propia.
Para determinados paquetes de software que han sido distribuidos de forma gratuita (shareware), una demo consiste en una versión recortada con una o más limitaciones respecto a la versión completa.
Las limitaciones más comunes son: Una vez el período de evaluación ha finalizado el usuario debe comprar un código de registro para poder seguir usando el programa.
También son partes inconclusas de juegos o programas.