Su rostro, carente de nariz, luce algunas cicatrices y una calavera en la frente.
Su ataque Demiagujas consiste en lanzar jeringuillas envenenadas.
Demidevimon intentó conseguir los emblemas de los niños elegidos mediante engaños, fracasando una y otra vez.
Posteriormente trató de reunir un ejército, consiguiendo tan solo una docena de debiluchos dirigidos por un digimon alcohólico, Nanimon.
Durante la invasión al mundo real, intentó encontrar y acabar con el octavo niño, sin éxito.