Decisiones difíciles

Clinton realizó una extensa gira promocional del libro, que tenía aire de campaña política con grupos a su favor y en su contra, los cuales aparecían en los eventos de firma del libro.

[4]​ El New York Post reportó "especulación de la industria" al decir que su avance podría ser tanto como $14 millones.

El primer borrador del manuscrito fue tres veces más grande que su edición final.

En el libro, Clinton expresa las situaciones de política externa enfrentadas durante su mandato como una serie de decisiones difíciles, especialmente aquellas que involucraban al Medio Oriente, la Primavera Árabe, Afganistán y Pakistán, y Rusia.

[13]​ Este libro provocó una atención especial a la Revolución egipcia de 2011, y la relación de Hilary Clinton con el presidente egipcio, y viejo amigo personal, Hosni Mubarak.

[15]​[16]​ En muchos otros casos mencionando que dichas discusiones "se mantendrán en privado para honorar el código de confidencialidad que debe existir entre un presidente y su Secretaria de Estado, especialmente mientras él siga en su cargo.

"[14]​[18]​ El libro concluye con unos pensamientos generales sobre sus visiones de América yendo hacia adelante,[14]​ pero no elimina la posibilidad sobre si participará para la presidencia en 2016, ya que solo menciona que "el tiempo para otra decisión difícil vendrá pronto.

[20]​ Después, cuando el capítulo del libro que trataba el ataque de Benghazi fuese filtrado en la revista Político,[17]​ los observadores sospecharon que esto fue hecho para tener noticias de forma temprana y evitar que dominara una posterior cobertura del libro en su totalidad.

[17]​ Por otro lado, hubo una competencia entre los principales noticieros y entrevistadores para tener las primeras entrevistas con Clinton sobre el libro.

[23]​ Los eventos del tour tenían aire electoral,[10]​[28]​[29]​ y cada uno atrajo la atención considerable de medios locales.

[29]​ Por ejemplo, el SuperPAC (Comité de Acción Política Independiente), conocido como Ready for Hillary, solía estacionar un autobús cerca de los eventos y regalaba estampas y pósteres, además reclutar voluntarios.

[29]​ Durante una aparición promocional en Washington D. C., Clinton se acercó a la figura naranja y dijo, "Hola, Sr. Ardilla, ¿cómo está?

"[14]​ Peter Baker del New York Times Book Review lo comparó algo desfavorablemente con la memoria del ex secretario de Estado de 1969 Dean Acheson, Present at the Creation: My Years in the State Department (Presente en la Creación: Mis años en el Departamento de Estado), concluyendo su crítica aludiendo a la posibles aspiraciones presidenciales de Clinton diciendo que "Acheson ganó un Pulitzer por su memoria.

[41]​ Debutó inicialmente en el New York Times Best Seller list for hardcover nonfiction.

[42]​[43]​ En la cuarta semana, las ventas bajaran otra vez y el libro se entregó el primer puesto de la lista de Times Best Sellers a Blood Feud: The Clintons vs.

[42]​ En su lanzamiento inicial de junio 10, fue publicado en Canadá, Gran Bretaña, Australia, India, Alemania, Países Bajos y Francia.

[42]​ La traducción al español, Decisiones difíciles, fue lanzada el 24 de junio en los Estados Unidos..

[51]​ La edición de bolsillo también tiene una nueva portada, a color, en donde Clinton tomada en ángulo a distancia de la cámara, volteando su cabeza y sonriendo ligeramente, mientras está vestida con una blusa azul y con unos aretes plateados acentuados.

La edición italiana, Scelte difficili , de venta en una librería en Florencia