Fue desarrollado por Zombie Studios, y es el primer juego en ser alimentado por el motor Unreal Engine 4.
La trama se centra en una mujer llamada Sarah, que recupera la conciencia en un hospital abandonado sin recordar cómo había llegado allí.
El jugador no tiene acceso a armas; las únicas herramientas disponibles son barras lumínicas, bengalas, y un teléfono celular.
Al aumentar el nivel de amenaza, los monstruos son más propensos a aparecer.
Su intento de ampliar la fórmula Slender es sólo agradable durante todo el tiempo que busques jugar algo como eso, y no es para nada eficaz".