Por ese tiempo estuvo en la Real Fuerza Aérea británica por lo que fue destinado a Hong Kong.
Fue durante un viaje a Guanajuato y a San Miguel de Allende que Brading se interesó por la Historia mexicana, investigando, bajo la supervisión del también historiador británico John Lynch, sobre el Virreinato de Nueva España en 1962, de la que resultaría una tesis en 1965.
En 1966 se casó con Celia Wu Brading, una reconocida historiadora peruana que colaboró junto a Jorge Basadre.
En 1979 obtuvo el premio de la Academia Británica por sus investigaciones en México, lo que le permitió volver a dicho país.
En el 2002 fue condecorado con la Orden del Águila Azteca por el presidente Vicente Fox en la Royal Academy en Londres.