Dark Souls III

Dark Souls III (ダークソウルIII, Dāku Souru Surī) es un videojuego de rol de acción desarrollado por FromSoftware y publicado por Bandai Namco Entertainment para PlayStation 4, Xbox One y Microsoft Windows.

El sistema de armadura y estabilidad (estadística que permite resistir golpes sin perder el balance) ha sido completamente cambiado en comparación de los otros 2 juegos, reduciendo sus capacidades defensivas y volviéndola más efectiva al tomar roles ofensivos en peleas, lo que resulta en una jugabilidad similar a Bloodborne.

También existe un modo PVP, donde tradicionalmente un jugador podría invadir a otro para intentar matarlo, o bien, se pueden usar señales de invocación.

Estos humanos son despertados cuando los Señores de la Ceniza (aquellos que sí que fueron suficientemente poderosos como para enlazar la Primera Llama) son despertados pero no cumplen su deber: quedarse en sus tronos (en el Santuario de Enlace del Fuego) hasta que se les vuelva a sacrificar para enlazar la Primera Llama.

Estos Señores de la Ceniza son cinco (pese a que se supone que muchos más humanos y Dioses se han inmolado a lo largo de la historia): Vigilantes del Abismo.

Hay bastante polémica alrededor de este "jefe final"; y es que se nos da a entender en varios objetos que Lorian y Lothric rechazaron su destino; esto haría parecer que no enlazaron la Primera Llama, sin embargo, Lorian está envuelto en llamas, como los Latentes en estado Ascua, en su segunda fase.

Llegó, incluso, a derrotar al Príncipe Demonio, y por ello su espada está envuelta por llamas, permanentemente.

Cuando nació su hermano pequeño, este resultó ser deforme y enfermizo; estos defectos son explicados porque sus padres, el Rey Oceiros y la Reina (no se sabe quién es, aunque la hipótesis de que es Gwynevere es muy sólida), recurrieron a medios infames para conseguir al heredero perfecto para enlazar la Primera Llama.

Este es el único Señor de la Ceniza que no ha abandonado su trono.

Esta primera expansión introduce una nueva área: el Mundo Pintado de Ariandel.

Una chica pintora le cuenta al Latente sobre la promesa del "Tío Gael" de encontrarle tintes para pintar un nuevo mundo.

La pintora agradece al jugador por mostrarle la llama y espera a Gael para el Alma Oscura, que ella puede usar para pintar un nuevo mundo para la humanidad.

Allí, el Latente se encuentra con un desaliñado Gael, quien ha comenzado a matar a los Señores Pigmeos para obtener la sangre del Alma Oscura de los Pigmeos para que la chica pintora en Ariandel la use como tinta.

Después de consumir el Alma Oscura, Gael acaba corrompido por su poder y demanda la porción del Latente.

Finalmente es derrotado, permitiendo al jugador obtener su sangre (que contiene el Alma Oscura) dando la posibilidad de entregarselo a la pintora en Ariandel, quien la usa para pintar un nuevo mundo para la humanidad.

[15]​ Sin embargo, al igual que los anteriores juegos narran sus historias, Dark Souls III desarrolla la trama con una fuerte ambigüedad: los jugadores pueden conocer la historia solo a través de la conversación con personajes no jugables (NPCs), el diseño artístico y el texto descriptivo de los objetos.

Debido a esto, Miyazaki afirma que no hay una historia oficial y única.

[27]​ Categoría con el que coincide Salva Fernàndez de Meristation, al sobresaltar la maginifcencia del título con un 100/100 por y considerarlo un "coloso de su generación que seguirá siendo comentado y recordado en el futuro".

[29]​ Esta linealidad, que muchos críticos señalan como un mal menor, es a ojos de Fu Olmos, del portal Anait, una decisión de diseño que, bien utilizado, se comunica con el jugador sin dar indicaciones explícitas.