El curio (símbolo Ci) es una unidad no-SI de radioactividad, definida, originalmente, en 1910.
Fue, originalmente, definido como "la magnitud o masa de emanación de radio en equilibrio con un gramo de radio (elemento), pero es, normalmente, definido como 1 Ci = 3.7 x 1010 decaimientos por segundo después más precisas mediciones de la actividad del 226Ra (la cual tiene una actividad específica de 3.66 x 1010 Bq / g).
En 1975, la "General Conference on Weights and Measures" dio el becquerel (Bq), definido como un deterioro nuclear por segundo, estatus oficial como la unidad SI para actividad.
Por ello: 1 Ci = 3.7 x 1010 Bq = 37 GBq y 1 Bq ≅ 2.703×10−11 Ci ≅ 27 pCi Mientras su uso continuado esta desanimado por la "National Institute of Standards and Technology (NIST)" y otros cuerpos, el curie es aun ampliamente utilizado a través del gobierno, industria y medicina en los Estados Unidos y otros países.
En la reunión de 1910, la cual, originalmente, definió el curie, se propuso hacerlo equivalente a 10 nanogramos de radio (una cantidad práctica).
De acuerdo con Bertram Boltwood, Marie Curie pensó que "el uso del nombre "curie" para una magnitud infinitesimalmente pequeña de cualquier cosa era totalmente inapropiado".
La potencia emitida en deterioro radiactivo correspondiendo a un curie puede ser calculado al multiplicar la energía de desintegración por aproximadamente 5.93 mW / MeV.
Una máquina de radioterapia deberá tener apenas 1000 Ci de un radioisótopo tal como cesio-137 o cobalto-60.
La desintegración radiactiva produce emisión de radiación de partículas o radiación electromagnética.
Un cuerpo humano conteniendo 15 kg de carbono (vea Composición del cuerpo humano), también, podrá tener cerca de 24 nanogramos o 0.1 μCi de carbono-14.
Juntos, estos podrá resultar en un total de aproximadamente 0.2 μCi o 7400 decaimientos por segundo adentro del cuerpo de la persona (mayormente como desintegración beta, pero algunas de desintegración gamma).
Ya que la probabilidad de desintegración es una magnitud física fija, para un número de átomos conocidos de un radionucleido particular, un número predecible se desintegrarán en un momento dado.
La actividad de una muestra decrece con el tiempo por la desintegración.
Las reglas de desintegración radioactiva deben ser utilizadas para convertir actividad a un número de átomos actuales.
y así También, podemos expresar actividad en moles:
El número de moles debe ser convertido a gramos al multiplicar por la masa atómica.
Acá hay algunos ejemplos, ordenados por vida media.
El curio representaba una cantidad muy grande de radiactividad desde el punto de vista biológico, por lo que se comenzaron a utilizar unidades más pequeñas: El curio ha sido reemplazado por una unidad derivada del SI, el bequerelio (Bq): El curio indica cómo se emitían partículas alfa o beta o rayos gamma de una fuente radiactiva, por unidad de tiempo, pero no indica cómo podría afectar dicha radiación a los organismos vivos.
La dosis de radiación se mide en grais.