La locución latina cum grano salis traducida literalmente significa "con un grano de sal" y figuradamente parece significar que uno debe aplicar una capa de sano escepticismo a una determinada afirmación y no darla por certeza absoluta sin haberla contrastado antes debidamente.
Hay consenso en atribuir su origen a Plinio el Viejo, en su Naturalis Historia, XXIII, 149, donde hace referencia a la receta de un antídoto contra venenos, que fue encontrada por Pompeyo el Grande tras su victoria en 63 a. C. sobre el también Grande Mitrídates VI, entre los papeles personales del monarca, escrita de su propia mano.
Podría entenderse que las amenazas que pudieran presentar los venenos en el futuro, una vez conocido el antídoto, podrían tomarse "con un grano de sal", es decir, con menos seriedad.
Por otro lado, en otras lenguas europeas, como en alemán, la locución se utiliza en ese sentido escéptico e irónico, mientras en español, según el DRAE,[2] "con su grano de sal" significaría: "Dicho de tratarse y gobernarse, especialmente un punto arduo y delicado: Con prudencia, madurez y reflexión."
Pero éste no es, sin embargo, el que se desprende de la cita pliniana.