Cuatro sentencias de muerte es una película dirigida por Jirí Svoboda.
El policía Karel Hrubes (Michal Dlouhý) quiere aumentar sus ingresos de cualquier forma... Con la ayuda de 2 amigos deciden montar un prostíbulo de lujo.
Necesitarán algún crédito bancario y avales que les garanticen los préstamos.
Para ello optarán por la vía más rápida, asesinar al quien se interponga en el camino, contratando a un sicario.
Los cadáveres se encontrado en el lago Orlík en la Bohemia (República Checa).