El acuerdo fue que las cuatro regiones habían de cooperar en una relación a largo plazo en los campos de la ciencia, investigación, educación, medio ambiente, cultura y otros sectores.
Estas regiones se centraban en el intercambio de información entre sí para ampliar su tecnología y en I+D.
Regiones como Gales o Flandes también estaban asociadas con este grupo para participar en ciertas iniciativas.
Rhônes-Alpes sigue siendo una región rica, pero ya no es comparable a la Isla de Francia.
[11] Regiones muy prósperas de Inglaterra o Países Bajos, han aparecido en la escena europea como actores económicos destacados.