[2] Desde joven se interesa por la historia local y participa en numerosos proyectos municipales.Por su labor a favor de la cultura local es nombrado en 1962 cronista oficial de la ciudad y un año después director de la biblioteca municipal tras el fallecimiento de Juan Pérez Arriete, quien desempeñara ambos cargos hasta 1961.Suya fue la responsabilidad de que se construyera una nueva sede en 1966 que sustituiría a la que por entonces tenía en la Sociedad algecireña de Fomento.[4] Dicho edificio, situado en la calle Salvador Allende lleva en la actualidad su nombre gracias a que la Corporación Municipal así lo acordó bajo el mandato del por entonces alcalde Patricio González García.[6] A partir de ese momento dedica gran parte de su tiempo a la investigación histórica y costumbrista, dicta conferencias por toda la geografía española acudiendo a numerosos congresos y escribiendo una decena de libros sobre la historia de su ciudad y de diversas instituciones locales.