Produce sus flores en el tronco del árbol y los frutos son parecidos a calabazas con corteza dura de los cuales se elaboran vasijas y también se utilizan como remedio en infusión alcohólica.
Sin embargo, parece ser una contra estrategia productiva, ya que las semillas en los frutos no germinan a menos que estos se rompan y queden abiertos, con la excepción de los caballos y los seres humanos, los animales no pueden romper los frutos.
Así pues, la pregunta sigue siendo: ¿cómo C. alata pudo evolucionar un mecanismo de defensa (impenetrables frutas), que impide totalmente la germinación de sus semillas?.
No es sorprendente que la mayoría de las veces se encuentran en espacios abiertos, como los pastos y campos.
Tomo I, la composición química de la pulpa del fruto contiene:[3] Con la pulpa se prepara una especie de jarabe para aliviar afecciones respiratorias y también es utilizado como ungüento tópico para heridas y golpes.
Con las semillas se elabora una bebida parecida al chocolate para uso medicinal.
[5] Crescentia alata fue descrita por Carl Sigismund Kunth y publicado en Nova Genera et Species Plantarum (quarto ed.)