Deutoronomio 26:1,4 "Cuando entres en la tierra que Yahvé tu Dios te da en herencia, cuando la poseas y habites en ella, tomarás las primicias de todos los frutos de la tierra que coseches en la tierra que Yahvé tu Dios te da, las pondrás en una cesta y las llevarás al lugar elegido por Yahvé tu Dios para poner allí la morada de su nombre.
; en lo poco has sido fiel, al frente de lo mucho te pondré; entra en el gozo de tu señor.’ Acercándose también el de los dos talentos dijo: ‘Señor, dos talentos me entregaste; aquí tienes otros dos que he ganado.’ Su señor le dijo: ‘¡Bien, siervo bueno y fiel!
Mira, aquí tienes lo que es tuyo.’ Mas su señor le respondió: ‘Siervo malo y perezoso, sabías que yo cosecho donde no sembré y recojo donde no esparcí; debías, pues, haber entregado mi dinero a los banqueros, y así, al volver yo, habría cobrado lo mío con los intereses.
Y al siervo inútil, échenlo a las tinieblas de afuera.
Hebreos 13:16 "No descuiden la beneficencia y la comunión de bienes; ésos son los sacrificios que agradan a Dios".
1 Juan 3:17,18 "Si alguno que posee bienes del mundo, ve a su hermano que está necesitado y le cierra sus entrañas, ¿cómo puede permanecer en él el amor de Dios?
Hijos míos, no amemos de palabra, ni con la boca, sino con obras y según la verdad".
[5] Somos administradores y no propietarios de la vida que Dios nos ha confiado.
Esta carta pastoral aceleró lo que ya era un movimiento de Corresponsabilidad a un crecimiento rápido entre los católicos estados unidenses.
Esto implica el dar de tiempo, talento y tesoro para la Iglesia local.
[11] "Es necesario que nuestros fieles se sientan realmente miembros de una comunidad eclesial y corresponsables en su desarrollo".
São Paulo: Paulus, 2007 International Catholic Stewardship Council Argentina: Compartir Chile: Uno Por Ciento Ecuador: Cinco Panes, Dos Peces