Corporación de la Vivienda

En 1953, durante el gobierno del presidente Carlos Ibáñez, el Congreso Nacional entregó facultades extraordinarias al Gobierno para realizar un plan de estabilización económica, en el cual se orienta la política de vivienda a un nivel nacional y se alude por primera vez a “planes nacionales de vivienda”, a “soluciones integrales” y de “racionalización y coordinación de acciones”.Ese organismo fue la Junta Ejecutiva del Plan de Viviendas.Durante sus seis primeros años de existencia, la CORVI pudo construir o financiar alrededor de 25.000 casas económicas, un desarrollo que resultaba insuficiente para paliar el creciente y grave problema de vivienda en Chile.El presidente Jorge Alessandri, al iniciar su mandato en 1958, puso en práctica algunas medidas, definidas como trascendentales, para enfrentar el problema habitacional, dictado el DFL nº2 (31 de julio de 1959), un instrumento sin precedentes en la historia económica del país, destinado a movilizar, encauzar y fomentar los recursos estatales e institucionales, el ahorro y el crédito público y privado en favor de la vivienda popular.[2]​ La CORVI estuvo en funcionamiento hasta 1976, cuando la dictadura militar cerró una serie de entidades estatales, incluyendo la COU y la CORHABIT, los cuales dieron paso al Servicio de Vivienda y Urbanización.