Fort nació en el seno de una familia rica y prominente de Nashville, Tennessee; su padre, Rufus Elijah Fort, fundó la National Life and Accident Insurance Company.
Desde joven se interesó por el vuelo, recibió lecciones y obtuvo su licencia de piloto en Hawái.
En instantes, vio columnas de humo negro que se elevaban desde Pearl Harbor mientras los bombarderos convergían hacia allí.
El 21 de marzo, estando en tránsito en Dallas, Fort y otros pilotos convinieron en realizar el último tramo en vuelo de formación en bandada, algo para lo que ella no estaba entrenada y estaba absolutamente prohibido.
Cornelia Fort tuvo el dudoso honor de ser la primera mujer WAFS en perecer en la contienda.