De los seis participantes, que se enfrentaron en un sistema de todos contra todos, los dos primeros, Australia y las Islas Salomón, no solo disputaron la final del torneo, sino también la última ronda de las eliminatorias oceánicas.
La selección australiana se consagró campeón tras vencer con un marcador global de 11-1 a las Islas Salomón, obteniendo así su cuarto (y último) título en el certamen.
Además, en su calidad de campeón de Oceanía clasificó a la Copa FIFA Confederaciones 2005 celebrada en Alemania.
Al estar Australia y Nueva Zelanda ya clasificados automáticamente, las 10 selecciones restantes de la OFC disputaron una eliminatoria que constó de dos grupos de cinco equipos cada uno.
Por un lado clasificaron las Islas Salomón y Tahití, mientras que en la otra zona se erigieron como primeros Vanuatu y Fiyi.