El condado de Castelo es un título nobiliario español creado (con el vizcondado previo de Castelo), por Real Decreto el 29 de octubre de 1699 por el rey Carlos II, otorgando el Real despacho el rey Felipe V el 14 de noviembre de 1702, a favor de Nicolás de Pardiñas-Villar de Francos y Bañuelos, en recuerdo de los méritos de su padre Bernardino de Pardiñas-Villar de Francos, Regidor de Madrid,[1] así como de sus ilustres antepasados novohispanos.