Se especializó tanto en sonetos, en la lira y en oda sáfica.
[1] Comenzó a publicar en la década del 40, y su primer libro fue El regreso de la samaritana.
Concepción fue hermana de Clara Silva, destacada y reconocida poetisa y narradora; la familia fervientemente católica les inculcó los valores religiosos.
La religiosidad se ve en sus obras, es más espiritual que intelectual, pues para Concepción a veces era Dios quien le dictaba, a veces "las almas de los poetas unidos que quieren no morir".
Comenzó a publicar en la década del 40, por eso el término "reservista" con que la crítica la denominó.