Por tanto, involucramiento en el trabajo significa identificarse y comprometerse con un trabajo específico, en tanto que el compromiso organizacional es la identificación del individuo con la organización que lo emplea (Robbins, 2009: 79).
Para Díaz y Montalbán (2002) sería la identificación psicológica de una persona con la organización en la que trabaja.
Uno de los modelos multidimensionales más populares ha sido el enunciado por Meyer y Allen (1991).
En cuanto a los antecedentes, varios son los que modulan el compromiso de las personas con su Organización.
A grandes rasgos podemos agruparlos en dos: características personales y factores situacionales.