Además, el código fuente se percibe como la definición operativa del software, considerándose la documentación como un complemento.
Se explora la percepción común de que el código y la documentación son a menudo vistos como elementos opuestos en la comunicación de la funcionalidad del software.
Por último, el libro sostiene que la construcción es la única actividad garantizada para quedar completa.
La séptima parte completa del libro se centra en la artesanía del software (diseño, estilo, legibilidad, estructuras y auto-documentación).
Las otras seis partes del libro abarcan: establecer los cimientos, crear código de alta calidad, variables, declaraciones, mejoras de código y consideraciones del sistema.