Sin embargo, la originalidad, intensidad y calidad de las historias hicieron que el ya popular por entonces Stephen King manifestara: “He visto el futuro del horror y su nombre es Clive Barker” (parafraseando una famosa frase dicha sobre Bruce Springsteen en sus comienzos).
Se inició con los cortos The Forbidden (1973) y Salome (1978), películas experimentales con elementos surrealistas que fueron posteriormente relanzadas con una aceptación moderada de la crítica.
En 1998 produjo la película Dioses y monstruos (Gods and monsters), recibiendo el elogio de la crítica.
En el 2009 fueron adaptados dos cuentos extraídos de Books of Blood y Jerusalem Street en una sola película; sin embargo ésta no tuvo mucho éxito.
Desde 2005, IDW Publishing ha publicado varias adaptaciones al cómic de sus obras, como su novela infantil "El ladrón de días" (The Thief of Always), por Kris Oprisko y Gabriel Hernández y la adaptación de "El gran espectáculo secreto" (The Great and Secret Show), por Chris Ryall y Gabriel Rodríguez.