Clausura (informática)

Una cerradura es un registro que contiene una función junto con el ámbito donde fue declarada.

En tiempo de ejecución, cuando se ejecuta la función externa, se forma una clausura, que consta del código de la función interna y las referencias a todas las variables de la función externa que son requeridas por la clausura.

No obstante, la variable mantiene su valor de forma indefinida para las siguientes invocaciones.

Como consecuencia, las clausuras pueden ser usadas para simular el encapsulamiento y la ocultación de la programación orientada a objetos.

[4]​ Desde entonces, otros lenguajes de programación han sido diseñados para soportar clausuras.