Un año después, Rachel se casó con Henry Franklin, que lo adoptó como propio.
Manteniendo su púlpito en Bethel, predicó por todo el país, siendo apodado el hombre con la "Voz del millón de dólares".
Franklin también adoptó como propio el hijo que Barbara había tenido de soltera, Vaughn (1934-2002).
Fue llevado al cercano hospital Henry Ford, donde quedó en coma sin volver a recuperar la consciencia.
Sus hijos lo trasladaron a su casa seis meses después, donde permaneció atendido por una enfermera las veinticuatro horas.
Fue enterrado en el cementerio Woodlaw de la ciudad, y el reverendo Jasper Williams Jr.