Kaori se va en su búsqueda, descontenta con la forma en que Ryo ignora sus sentimientos románticos por él y coquetea con otras mujeres.
Shizuko embarca en un lujoso transatlántico, el Fuji Maru, perseguida por nuestra pareja protagonista, pero también por la banda de un terrorista llamado MacDonald que planea tomar a los pasajeros como rehenes.
Para derrotar a los esbirros Ryo utiliza las técnicas de Bruce Lee que ve en la película.
Cuando la unidad antiterrorista de Taiwán llega al barco, MacDonald toma a Kaori como rehén en el casino.
Ryo y el villano luchan hasta que MacDonald pisa accidentalmente una de sus bombas.