Las Chicas de Divito es un término que puede referirse en sentido amplio a cualquiera de las chicas que Guillermo Divito dibujaba en las tapas de Rico Tipo, en sus tiras, o en cualquier viñeta, o en sentido restringido, a la sección que con ese nombre dibujaba Divito en la citada revista y que contenía un chiste gráfico a gran tamaño protagonizado por estas muchachas.
Se vestían ceñido al cuerpo y mostraban prácticamente los brazos enteros, usando midifaldas que casi eran minifaldas gran parte de sus sensuales piernas; tal estereotipo de mujer occidental en Argentina y Uruguay, es temprano ejemplo de la revolución sexual (hasta llegaron a ser representadas hace 60 años -si contamos regresivamente de fines del 2014- semivestidas con bikinis).
Comenzó a dibujarlas en Patoruzú en 1936, y se dice que los repetidos desacuerdos con Dante Quinterno, su director, por el largo de las faldas, fueron uno de los principales motivos para que Divito decidiera irse y fundar su propia revista.
Sin quererlo, marcaron la moda femenina de su época en Buenos Aires: las mujeres querían parecerse a las chicas de Divito y pedían a las modistas que les diseñaran ropas parecidas.
Otro tanto pasó con los dibujos de Divito y la moda masculina: las exageraciones que Divito dibujaba, pasaban luego a ser usadas por muchos hombres, especialmente los más jóvenes.