El Instituto Africano fue fundado por Richard Humphreys, un filántropo cuáquero que legó 10.000 dólares (equivalente a 271.433 dólares en 2021), una décima parte de su patrimonio, para diseñar y establecer una escuela para educar a los afrodescendientes y prepararlos como maestros.
Nacido en una plantación en Tórtola, una isla en las Indias Occidentales Británicas, Humphreys llegó a Filadelfia en 1764.
Encargó a trece compañeros cuáqueros que diseñaran una institución "para instruir a los descendientes de la Raza Africana en el aprendizaje escolar, en las diversas ramas de las artes mecánicas, oficios y agricultura, a fin de prepararlos y adecuarlos y calificarlos para actuar como maestros".
La escuela pronto pasó a llamarse Instituto para la Juventud de Color.
En sus primeros años, capacitó en comercio y agricultura, ya que esas eran las habilidades predominantes necesarias en la economía en general.