El edificio es un conjunto amurallado situado en el monte Acuto, en el punto de confluencia de los ríos Ema y Greve.
En 1958, el monasterio pasó a manos de los monjes cistercienses.
En la actualidad, la sala capitular alberga cinco lunetos al fresco de Pontormo procedentes del claustro, dañados por la exposición a la intemperie.
La cartuja inspiró a Le Corbusier para sus proyectos urbanísticos.
[1] El monasterio alberga la «Società Internazionale per lo Studio del Medioevo Latino», un instituto cultural italiano sin ánimo de lucro.