El Cerro de la calavera es un viejo cerro, muy diminuto y olvidado, que se localiza en Tlalnepantla, casi colindando con Ecatepec de Morelos, abajo de las faldas del Cerro Petlecatl.
Su uso es urbano; está completamente rodeado de casas excepto una parte que hace honor a su nombre.
En esa parte del cerro sería imposible de habitar por la forma ya gastada y deformada.
En esa parte del cerro se ve la forma de un cráneo humano, una calavera pintada tiempo después de blanco que se ve llegando por la autopista México-Pachuca.
A pesar de que las edificaciones son ya viejas, es una zona muy limpia y agradable.