Castillo de Florejacs

El nombre fue latinizado por los romanos, como Floriacus, y de ahí pasó a Florejacs.

En un patio que en su tiempo fue un cementerio exterior se abría la puerta que daba a la capilla románica del castillo, hoy integrada dentro la iglesia del pueblo, construida en el siglo XVIII y ampliada en el siglo XIX.

La puerta románica todavía subsiste en el interior de la iglesia con el escudo Josa sobre el arco.

Por una escalera situada en la entrada, se llega a la planta noble, ocupada principalmente por salitas y salones.

Del salón hall parte otro tramo de escaleras que lleva a una sala de la planta alta decorada con armas que da acceso a otras dependencias, entre las cuales, varios dormitorios.