Se cuenta que el rey Fernando el Católico pasó una noche en este castillo.
Los restos que vemos hoy en día son dos torres construidas sobre una peña en la parte central del pueblo.
Soponemos que su remate pudo ser almenado, aunque en la actualidad está desmochada con grandes pérdidas de material y la puerta está muy modificada.
Al otro lado de un pequeño barranco tenemos otra torre muy parecida pero cubierta por tejado moderno a un agua.
Además de esto quedan pequeños restos de muro que en su momento unirían las dos torres y cerrarían el recinto fortificado.