La estructura de este castillo se basa en el arte gótico.
Su construcción se remonta a 1841 cuando Enrique Beschtedt compra el terreno y contrata a Ernesto Moreau, quien fue uno de los ocho arquitectos que trabajaron en la Basílica de Luján, el belga para la obra.
[1] Enrique y su única hija, Irene, se instalaron en una pequeña casa de la propiedad.
Años después esta se casa con el Dr. Domingo Fernández, dando comienzo a la dinastía Fernández Beschtedt que luego tendrían a Elina Lucía, José Salvador, Alberto Manuel, Adolfo María, Manuel José María Flavio, Enrique, Alfonso Rodrigo, Enriqueta Matilde y María Inés.
En la actualidad, Alfonso Rodrigo Naveira Fernández Beschtedt, dueño del castillo, no permite la entrada al público[2]