Este caso fue muy mediático en Chile no solo por la salvaje golpiza que recibió la joven, la cual causó gran conmoción en el país y puso en la palestra la violencia intrafamiliar, sino también por lo misterioso y controversial que parecía ser el caso, debido a que durante el juicio y por la gran cobertura mediática, se revelaron muchos detalles de la vida íntima de la víctima.
Elvis, hermano menor de Nabila, quien se encontraba en el lugar, conversa con Ortega y este acaba por retirarse.
Minutos después, personal de carabineros se presenta en el lugar para tomar declaraciones y constatar daños.
La joven no logró ser identificada, pero fue llevada rápidamente al único hospital de la ciudad.
Hubo que darle ventilación artificial y posteriormente someterla a una cirugía que duró cuatro horas, en la cual varios profesionales se dedicaron a tratar las fracturas, realizarle un aseo quirúrgico en la zona de los ojos y reparar su pabellón auricular.
La joven no recuperó el conocimiento hasta cuatro o cinco semanas después del ataque.
Después del brutal ataque que dejó a Nabila Rifo con riesgo vital, Mauricio Ortega se retira del lugar para regresar casi inmediatamente y con un objeto punzante extraerle ambos globos oculares, primero luxando el ojo mediante palanca y después desgarrándolo con la mano.
Estos hechos causaron real indignación tanto en quienes realizaban las entrevistas como en los televidentes.
[5] Fue trasladado con urgencia al Hospital Regional, donde fue declarado muerto a las 01:00 del día viernes 2 de febrero.