En 1986 Gobierno del Estado de Sonora compró la casa que fuera propiedad del compositor Silvestre Rodríguez,[1] músico mexicano, en el municipio de Nacozari de García, y fue hasta 1988 que se convierte en museo, honrando así su memoria.
[2] Dicho museo cuenta con un total de siete espacios.
Tres salas dedicadas a Jesús García Corona, héroe de Nacozari, otra a Silvestre Rodríguez, una a Manuel S. Acuña,[3] compositor y músico sonorense; una oficina, un anexo que se utiliza para realizar talleres.
El museo recibe aproximadamente 25 personas por mes.
[4] La colección se compone de piezas que pertenecieron a Silvestre Rodríguez, así como información sobre su vida e historia de Jesús García Corona.