Así pasó durante el escándalo de los Petroli, anunciado años antes en su cotidiano.
Su unión con los servicios secretos, sospechada por muchos ya que tenía acceso a documentos para nadie pensables en la época, fue confirmada por Nicola Falde (coronel de los servicios secretos italianos del 1967 al 1969).
Desde el 1970 al 1974 tuvo lazos con Vito Miceli (jefe de los servicios secretos militares) y estuvo bajo sentencias judiciales también con el general Carlo Alberto Dalla Chiesa.
Giulio Andreotti junto a Calò Giuseppe, Vitalone Claudio, Carminati Massimo Badalamenti Gaetano, La Barbera Michelangelo fueron acusados por mandar que lo asesinaran; La Barbera E il Carminati como ejecutores.
Acabó todo con muchas preguntas que siguen perjudicando la fama de Andreotti.